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2 de enero de 2001
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Recopilado de los Servicios Noticieros

 
San Juan, 2 de enero - En presencia de varios dignatarios y presidentes latinoamericanos, Silá M. Calderón fue juramentada gobernadora de Puerto Rico por el juez presidente de la Corte Suprema, José Andréu García, en una ceremonia inaugural que se celebró en San Juan.
 
A la toma de posesión de Calderón acudieron los presidentes de Haití, René Preval; Venezuela, Hugo Chávez; Panamá, Mireya Moscoso y República Dominicana, Hipólito Mejías, entre otros.
 
También acudieron el vicepresidente de Nicaragua, Leoporto Navarro, el embajador de la Argentina, Guillermo González y el representante del Vaticano en la República Dominicana.
 
Los congresistas Luis Gutiérrez (D-Ill.), y Nydia Velázquez, (D-NY), también estuvieron presentes.
 
En el discurso de 20 minutos que pronunció ante el gentío que se agolpaba en el lado norte del Capitolio ondeando banderas puertorriqueñas, Calderón, presidenta del Partido Popular Democrático (PPD), contrario a la estadidad, tendió su mano a las demás naciones del hemisferio.
 
"Aquí se unen las razas hispana y caribeña... vivimos, pensamos y oramos igual", afirmó.
 
La gobernadora alabó las relaciones de Puerto Rico con los Estados Unidos y, aunque los puertorriqueños valoran su ciudadanía estadounidense, añadió: "Ante todo, somos puertorriqueños".
 
Con el contraalmirante Kevin Green entre sus invitados, jefe de la Marina de los Estados Unidos, Calderón dijo que el pueblo de Puerto Rico quería la suspensión inmediata de las prácticas militares en Vieques y que esperaba que el Presidente Bill Clinton tomase acciones en dicha dirección antes de terminar su mandato.
 
"Desearíamos pensar que su sensibilidad por los derechos humanos y la justicia prevalecerán antes de que termine su mandato", afirmó Calderón.
 
La toma de posesión de Calderón, que se celebró tres semanas antes de la toma de posesión de George W. Bush como presidente de los Estados Unidos, suscitó la posibilidad de una relación aún más conflictiva entre Puerto Rico y el gobierno de los Estados Unidos.
 
En una entrevista realizada el lunes, Calderón afirmó que seguiría confiando en las promesas de expulsar a la Marina estadounidense de su preciado campo de tiro en la distante isla de Vieques y de clarificar el status de la isla con Washington.
 
Asimismo, Calderón afirmó que la cuestión del status debe ser resuelta por los puertorriqueños porque "es nuestra responsabilidad", al tiempo que alabó los beneficios de la unión de estados.
 
"La mayoría de las personas creen que los Estados Unidos no hacen lo correcto al continuar con los bombardeos de Vieques", dijo José Garriga Pico, catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad de Puerto Rico, añadiendo que un voto por Calderón era un voto "en contra del anterior gobernador [Pedro Rosselló] y sus políticas sobre Vieques".
 
Pero Pico dijo que Calderón, al igual que Rosselló, puede que tampoco sea capaz de dar a la gente lo que quiere.
 
"La Marina seguirá con las armas", predijo Pico. "[Calderón] va a tener dificultades para tratar de expulsar a la Marina de Vieques."
 
Pico también cree que Calderón tendrá poca suerte en su lucha por obtener una mayor autonomía de la confederación de los Estados Unidos. Como abanderada del Partido Popular Democrático, dijo Pico, es poco probable que cuente con la confianza del Presidente electo Bush tanto en la cuestión de Vieques como en el status.
 
"No tiene posibilidades porque los republicanos de Puerto Rico dominarán la conversación con Bush", afirmó. "Simplemente va a predicar en el desierto."
 
Uno de los momentos destacados de este acontecimiento incluyó la interpretación de los himnos nacionales a cargo del cantante puertorriqueño José Feliciano. El artista invidente volvió a entonar su versión con toques de blues del himno de las barras y estrellas que tanta controversia suscitó en los años 60 cuando lo interpretó por vez primera.
 
Los líderes pro-independentistas Julio Muriente y Héctor Pesquera también estuvieron presentes.
 
El único senador electo del Partido Nuevo Progresista (PNP) que no acudió a la ceremonia fue la Presidenta Interina del PNP, Norma Burgos.