| ¡Sobornos! ¡Pagos bajo la mesa! ¡Decisiones súbitas! ¡Lavado de dinero mediante contribuciones! ¡Canalizacion indebida de fondos!
De acuerdo con los fiscales federales e investigadores en la isla, esas declaraciones han enlodado la imagen de las más recientes elecciones en Puerto Rico. Titulares han puesto de manifiesto prácticas corruptas: "Fondos de contratos gubernamentales re-asignados a la campaña" y "Fondos de las elecciones locales se usan para pagar anuncios de Fortaleza". Durante más de 6 meses, la opinión pública de la isla sobre la validez de su proceso electoral se ha forjado en reñidas conferencias de prensa, acusaciones públicas, decisiones de jurados en los tribunales, dictámenes federales, declaraciones de culpabilidad y casos criminales. Los estudiantes de la política de la isla dicen que esas prácticas han existido durante mucho tiempo. Los políticos están buscando soluciones. La Gobernadora Sila Calderón dice que tiene la respuesta.
En definitiva la Gobernadora intenta hacer que el gobierno insular sufrague los costos de todas las campañas políticas, de todos los candidatos que se postulen a posiciones públicas, a través de la isla. El costo de la propuesta se calcula en unos 60 millones de dólares, una afrenta dolorosa a un presupuesto ya en déficit. Su legislación está siendo considerada en ambas cámaras de la legislatura que se están debatiendo la primera posición en el proceso de organizar audiencias públicas en torno a este asunto de gran relevancia.
Uno de los campeones de la propuesta es el Senador Fernando Martín del Partido Independentista de Puertorriqueño (PIP) que dice que las medidas en la reforma son "justas" ya que todos los partidos políticos quedarían en posición de "competir en igualdad" en las elecciones de la isla. Sin embargo, su apoyo lo hace aparecer como "el gato que se tragó el canario" ya que su partido apenas si logra acaparar más de un 5% del voto, pero recibiría una tajada de dinero igual a la que se le entregue al Partido Popular Democrático (PPD) y el Partido Nuevo Progresista (PNP), entidades que normalmente logran entre los dos una división del resto.
Se anticipa que la propuesta logrará convertirse en ley, en alguna de sus versiones. Las probabilidades son menores que todos sus proponentes se prevalecerán para disfrutar la victoria después que la última granada de enjuiciamientos explote en San Juan. |
