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3 de enero de 2003
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En la más reciente encuesta de Temas Candentes del Herald, los lectores seleccionaron al Presidente del Partido Nuevo Progresista (PNP), Carlos Pesquera, como la Personalidad Política del Año.   En los cómputos finales antes del cierre para esta edición, 36% de los participantes en la encuesta lo seleccionaron a él en comparación con un 29% que votó a favor de la actual Gobernadora de Puerto Rico, Sila Calderón.  El Representante en el Congreso de los Estados Unidos, José Serrano (D-NY), un puertorriqueño que representa el Distrito 16 del Bronx en Nueva York, logró un 15% de los votos en la encuesta, mientras que el Fiscal Federal Auxiliar del Departamento de Justica de los Estados Unidos en San Juan, Guillermo Gil, le siguió con un 8%.  12% de los participantes optaron por nominar su propio candidato, en vez de los cuatro nombres que se ofrecieron en la papeleta de selección.  De esos otros candidatos, el único nombre específico que se sugirió en los mensajes electrónicos que se enviaron al Herald, fue el ex-Gobernador de Puerto Rico Pedro Rosselló.

Pesquera, el supuesto rival a la Sra. Calderón en las elecciones por la gobernación en Puerto Rico en el 2004, mantuvo su ventaja sobre la actual Gobernadora, tanto entre los participantes residentes en la isla como los que viven en los Estados Unidos.  Sorprendentemente, entre los participantes que residen en la isla, Pesquera superó a la actual residente de La Fortaleza por 8 puntos.  64% de los participantes en la encuesta indicaron ser residentes en uno de los 50 estados, mientras que el 36% restante indicaron ser residentes en la isla.  Un análisis total del voto, según los porcentajes, y de los votos emitidos en las tres categorías de la encuesta, dejaron los siguientes resultados:

Candidatos:	Total de los votos	En los EE. UU.	Residentes en la isla
	100% del total	64% del total	36% del total
Carlos Pesquera	36%	35%	40%
Sila Calderón	29%	28%	32%
José Serrano	15%	17%	11%
Guillermo Gil	8%	9%	5%
Otros	12%	11%	12%

 

No hay manera de adivinar las razones específicas que llevaron a las selecciones de los lectores pero es evidente que Pesquera, igual que un fénix, ha resurgido de su derrota ante la Sra. Calderón en la campaña del 2000 por la gobernación y ha logrado mantenerse a flote y afrontar exitosamente las acusaciones de corrupción política, sentencias y procesamientos de funcionarios del PNP durante el gobierno de Rosselló.  Tal malabarismo político ha sorprendido a muchos que, el año pasado en esta época, dudaban que pudiera sobrevivir la mala reputación de su partido y mantenerse en la delantera como un candidato viable para la gobernación.  De tal posibilidad Pesquera se expresa con confianza, asegurando a quienes dudan que no teme a una primaria del partido enfrentándose al Alcalde de San Juan del PNP, Jorge Santini, y-o al ex Gobernador Pedro Rosselló en una contienda por la nominación del partido.  Más aún, ha expresado su confianza en que el electorado puertorriqueño va en esta oportunidad a ¨votar correctamente¨ y eso lo ubicará tras el escritorio de Ponce de León en La Fortaleza en enero del 2005.

Otro factor que sin duda ha favorecido la posición de Pesquera en la encuesta superando a Sila Calderón es lo que se percibe como su falta de capacidad en la posición de primera ejecutiva en la isla.  Justo mientras los lectores del Herald se encontraban votando por la personalidad política del año en Puerto Rico, ella se encontraba en medio de los procedimientos de reemplazo de miembros de su gabinete que renunciaron, retirando iniciativas para legislación que su partido domina y rechazando los llamados de Pesquera para la celebración de un plebiscito sobre el status político ahora en el nuevo año.  En su mensaje de fin de año a los puertorriqueños prometió poner en práctica nuevas iniciativas en el 2003, pero los votantes se cuestionan por qué se ha logrado tan poco durante su gobierno que ya se extiende dos años.  La economía de la isla está declinando y ella está operando con déficits gubernamentales.  Su excusa siempre es que son problemas económicos que ella heredó del gobierno de Rosselló, pero después de 24 meses de gobierno, esa explicación comienza a perder sentido.

Por último, podemos atribuir a la creciente popularidad de Carlos Pesquera a corje político, a veces casi irresponsable.  El incidente de su lucha por izar la bandera de los Estados Unidos en una oficina gubernamental revigorizó a los proponentes de la estadidad y al PNP.  También, se ha valido de toda oportunidad a su alcance para poner de manifiesto fallas en una serie de iniciativas y proyectos en los cuales la actual Gobernadora ha fracasado en promover una visión adecuada para el futuro político de Puerto Rico.  En la actualidad se enfrenta a cargo por disturbios públicos ante el Tribunal Superior de San Juan a raíz de su agresiva entrada a la Procuraduría de las Mujeres para ubicar una bandera de los Estados Unidos junto con la puertorriqueña que se encontraba en el vestíbulo.  Esa demanda, que enfrenta junto con otros tres colegas en el "asalto de la bandera," está programada a resolverse en el tribunal a comienzos de este año y él parece estarlo anticipando como una oportunidd para atacar las tendencias separatistas de la Gobernadora Calderón.  Su argumento es que esto es un caso de derechos civiles donde sus derechos civiles han sido violados.  El caso ante los tribunales podría generar dificultades para la Sra. Calderón si ayuda a Pesquera a asumir una "posición de martir".  Por otro lado, si el tribunal determina que es culpable de lo que se le acusa, eso podría complicar cualquier intento de postularse en el futuro para la gobernación ya que las leyes locales prohíben a toda persona con antecedentes criminales a postularse para posiciones públicas.

Carlos Pesquera se ha consagrado como un decidido líder de la oposición durante un año en que el Partido Popular Democrático (PPD) ha controlado todo el poder ejecutivo y legislativo en la isla mientras su partido, el PNP, se ha visto en medio de un torbellino de acusaciones por acciones indebidas cuando se encontraban en el poder.  Este año traerá nuevos desafíos para el líder del PNP en sus esfuerzos por lograr una metamorfosis de un candidato derrotado en el 2000 a un exitoso contrincante para la gobernación de Puerto Rico en las elecciones del 2004.