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Partidarios de la estadidad reciben respaldo

por Michelle Faul

15 de diciembre de 1998
©Marca Registrada 1998 The Associated Press. Todos los derechos reservados.


SAN JUAN, Puerto Rico (AP) - Los partidarios de la estadidad de Puerto Rico recibieron un inesperado respaldo del presidente Clinton.

Dicho respaldo y la declaración de apoyo del representante republicano Dan Burton, defensor de la estadidad, reforzaron los planes del gobernador Pedro Rosselló de perseverar en la cruzada para convertir a la isla caribeña en el estado 51º.

Rosselló sostuvo el lunes en una conferencia de prensa que el movimiento por la estadidad había triunfado en el referéndum no vinculante realizado el domingo, a pesar de haber de perdido ante la opción "ninguna de las anteriores", votada por los partidarios del Estado Libre Asociado (ELA) -status vigente en la isla- por 50 % contra 47%.

La opción por la independencia obtuvo sólo el 2 %, subrayando que, a pesar de ser ambivalentes con respecto a la estadidad, los puertorriqueños tienen muy poco interés en poner fin a un siglo de dominio estadounidense.

El partido propulsor del ELA mando votar por "ninguna de las anteriores" porque estaba en desacuerdo con la definición de ELA que aparecía en las papeletas. La definición establecía que Puerto Rico está sometido a la autoridad absoluta !del Congreso de los Estados Unidos y sugería que éste podría revocar la ciudadanía estadounidense de los isleños.

La estadidad, afirmó Rosselló, obtuvo la inmensa mayoría entre las personas que eligieron una de las opciones reales.

Los defensores del ELA y los medios de prensa locales menospreciaron el argumento de Rosselló.

Pero Clinton -a pesar del proceso de juicio político que se realiza en Washington y de los rigores de su viaje de pacificación a Medio Oriente- se hizo tiempo para emitir una declaración en la cual destacó que "la mayoría de los votos no fue para ninguna de las opciones".

"Del resto, la aplastante mayoría apoyó la estadidad", afirmó Clinton.". "Sigo comprometido a implementar la decisión de la mayoría sobre el futuro status de Puerto Rico". El presidente prometió trabajar junto con el Congreso y los puertorriqueños "para clarificar la decisión".

Rosselló dijo en conferencia de prensa que "una vez que se haya constituido el nuevo Congreso, ese será el momento adecuado para enviar los resultados... y decirle al Congreso y el Presidente: "respondan a estos resultados"

El gobernador manifestó que esa respuesta podría incluir otro referéndum.

La principal rival de Rosselló, la alcaldesa de San Juan, Sila Claderón, partidaria del ELA, declaró el lunes que su partido, el Partido Popular Democrático, estaría de acuerdo en realizar otra votación, pero sólo si una victoria d!el ELA garantizaba que no se volvería a poner en duda ese status, impuesto por los Estados Unidos como medida temporaria hace 46 años. En el último referéndum, en 1993, la opción del ELA venció a la estadidad por 49% contra 46%.

La semiautonomía concebida en 1952 permite a Puerto Rico gestos simbólicos propios de una nación independiente, tales como el tener un equipo olímpico propio. Y a pesar de no pagar impuestos federales, los puertorriqueños tienen la ciudadanía estadounidense y reciben miles de millones de dólares en ayuda federal.

Burton, Rep.-Ind., advirtió el lunes que en virtud del minúsculo apoyo -menos del 1%- conseguido por la definición de ELA que aparecía en las papeletas, "y dada la enorme carga económica impuesta al ya sobreexigido contribuyente americano, el Congreso debería, y muy probablemente lo hará, reevaluar el subsidio federal al presente status".

Burton anticipó "un largo proceso" que acabaría ofreciendo a los puertorriqueños sólo dos opciones: la independencia o la estadidad.

Ese escenario, que muchos puertorriqueños preferirían evitar, probablemente producirá la victoria de la estadidad, dado que los puertorriqueños valoran su ciudadanía estadounidense.

"Atesoramos nuestra ciudadanía estadounidense, pero somos puertorriqueños", declaró el lunes Calderón.

El representante José Serrano, demócrata representante de New York que nació en la isla, dijo además que la solución del ELA es "colonial" y que los puertorriqueños deberían escoger entre la estadidad y la independencia.

Pero también otro legislador estadounidense sostuvo que es improbable que Washington acepte el razonamiento de Rosselló.

"Es desalentador ver como las fuerzas que apoyan la estadidad subvierten la voluntad del pueblo, ahora que la votación ha concluido y que la opción de la estadidad ha fracasado rotundamente" dijo el representante Luis Gutiérrez, un demócrata de Illinois que es descendiente de puertorriqueños.

Rosselló convocó a la votación del domingo, frustrado porque que la iniciativa legislativa que proponía un referéndum obligatorio acabó muriendo en el Senado, tras haber sido aprobada por un voto en la Cámara de Representantes. La medida fue bloqueada por los republicanos que temían que el ingreso de Puerto Rico como estado le otorgara a los demócratas la mayoría en el Congreso.

Los opositores también argumentan que la estadidad le resultaría aún más costosa al gobierno federal, debido a que la mayoría de los puertorriqueños no ganan lo suficiente como para pagar impuestos federales.

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