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El Orlando Sentinel

Iván Román del personal de El Sentinel

25 de Marzo de 1999
©Marca Registrada 1999 The Orlando Sentinel. Todos los derechos reservados.

SAN JUAN, Puerto Rico - El Partido Democrático Popular, la oposición en Puerto Rico, optimista de arrancar la oficina del gobernador y la legislatura de las manos de un gobierno afectado por escándalos, está enredado en su propia polémica.

José Alfredo Hernández Mayoral, el hijo del gobernador de tres períodos previos, Rafael Hernández Colón, ha comenzado una campaña para ser el candidato del partido a comisionado residente, el representante no votante de la isla en el Congreso de E.U.

Pero lo hizo públicamente mientras que los líderes del PDP se reunían privadamente para afinar la estrategia de elección del próximo año y escoger una lista de candidatos aprobados por el partido. De acuerdo con los reportes de la prensa, la Alcalde de San Juan Sila Calderón, quien todos esperan que sea la candidata gubernamental del partido, dijo que si Hernández Mayoral es el candidato a comisionado residente, ella no se postulará.

Esto disparó una tormenta dentro del partido que favorece al Estado Libre Asociado contra la estadidad. La dirección ha intentado repeler la crítica de que el proceso de selección está cerrado.

Hernández Mayoral le pidió a la dirección del PDP estar de acuerdo con "reglas claras y justas que nos permitan tener una política limpia." Pidió un diálogo por un consejo que incluya más gente de la base del partido.

La dirección del partido rechazó la idea en la sesión de estrategia el Martes por la noche.

"Imponer en este partido una lucha primaria por la candidatura del comisionado residente sin primero escoger nuestro candidato a gobernador es poner la carretilla delante del caballo," dijo el Rep. Aníbal Acevedo Vila, presidente del PDP. "Si tenemos que ir a una primaria, iremos a una primaria más tarde. Lo triste es tener a alguien forzando una primaria en el PDP que pudiera evitarse."

Ha sido una costumbre en Puerto Rico para los líderes de partido seleccionar la lista de candidatos antes de abrir las candidaturas a todo el mundo.

Hernández Mayoral continúa defendiendo su derecho de postularse por la posición para representar a 3.8 millones de Puertoriqueños de la isla en Congreso y critica el actual procedimiento del partido.

"No estoy haciendo nada incorrecto," dijo Hernández Mayoral. "Si rechazan la idea del diálogo del consejo, entonces no me ofrecen la oportunidad the discutir mis intereses y lo que estoy haciendo."

Para algunos en la dirección del partido y en sus fieles, esta controversia e intercambio de observaciones mordaces en los periódicos y en la televisión y la radio sucede en muy mal momento.

El Gob. Pedro Rosello y muchos otros líderes, abogados y recaudadores de fondos del Partido Nuevo Progresivo han estado implicados en un juicio por mala apropiación y lavado de dinero concerniente a $2.2 millones en fondos federales que fueron a parar al ahora ya extinguido Instituto para AIDS San Juan. Los políticos del PDP también han estado implicados en el juicio y ya un previo senador del PDP se ha declarado culpable. Aún más, las alegaciones de que Rosello pidió algunos de estos fondos para su campaña política ha sido la mayor noticia.

A medida que la sombra de corrupción cuelga sobre el gobierno, muchos en el PDP sienten que su partido debería enfocarse en la crítica a Rosello y a otros en el partido que favorecen la estadidad para la isla.

Pero algunos piensan que la polémica tiene menos que ver con los procedimientos del partido que con el padre de Hernández Mayoral y lo que él representa. Su padre sirvió de gobernador desde 1973 hasta 1977 y desde 1985 hasta 1993, cuando la candidata del partido PDP Victoria "Melo" Muñoz perdió contra Rosello, cuando se postuló para su primer término.

De acuerdo a los reportes de la prensa, la votación del PDP dice que Calderón derrotaría a Rosello en la batalla por gobernador. Ella tiene el apoyo de casi todos los fieles del partido y ejerce mucho atractivo en los otros partidos.

"Algunos puedieran pensar que (con Hernández Mayoral) estaríamos retrocediendo al momento en 1992 en que el pueblo nos pateó al no estar satisfecho con nuestro trabajo," dijo el Rep. Del PDP Francisco Zayas Seijo.

La controversia tiene el potencial de solidificar fracciones dentro del PDP. Los líderes del Partido están ya atascados en confrontaciones muy públicas y amargas.

Otros candidatos están también presentándose. Los líderes del Partido dicen que tienen la esperanza de que todos desaparezcan, y que continuarán discutiendo estrategia y que presentarán una lista de candidatos proveniente del liderato.