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THE ORLANDO SENTINEL
La batalla llevó la esquizofrenia a la vanguardia
por Ivan Roman
16 de agosto de 1999
Marca Registrada © 1999 THE ORLANDO SENTINEL. Todos los derechos
reservados.
SAN JUAN, Puerto Rico - Ambas cosas ocurrieron el mismo día.
Y la coincidencia en el tiempo y el simbolismo sorprendieron a
unos cuantos.
El reverendo Jesse Jackson se unió a los manifestantes
y activistas el viernes por la mañana y caminaron juntos
por el bombardeado terreno del Vieques oriental, reclamando que
la Marina de Guerra estadounidense ponga fin a los ejercicios
militares y abandone la isla situada mar afuera de la costa sudeste
de Puerto Rico.
Al mismo tiempo, en San Juan, el gobernador Pedro Rosselló
observaba como descendían los paracaidistas Golden Knight
de la Marina de los EE.UU. en un desfile realizado en Fort Buchanan,
llevando la bandera del Ejercito del Sur de los EE.UU., que dejó
Panamá este año y fue mudado aquí.
En la ceremonia de bienvenida, Rosselló les dijo: "Esta
es su casa".
Pero en lo que respecta a Vieques, le ha dicho a la Marina
que limpie el lugar y se retire.
"Está tratando de echarlos de Vieques y los trae
a San Juan", dijo el activista socialista Carlos Gallisa.
"La diferencia es que un grupo viste de blanco y el otro
de caqui. Eso sólo ocurre en la esquizofrenia de la colonia..."
Rosselló, el gobierno de Puerto Rico, los partidos políticos
y muchos otros están en batalla con Washington para sacar
a la marina de Vieques desde que un fatal accidente ocurrido durante
prácticas de bombardeo mató a un guardian civil
en abril.
Antes de que eso ocurriera, el gobernador había movido
influencias para conseguir que parte del Comando del Sur se mudara
aquí. Unos 1300 soldados vienen a Buchanan y otros 400
a la Base Naval Roosevelt Roads, que ocupa tres cuartas partes
de la isla de Vieques, de 52 millas cuadradas, usada para entrenamiento.
Rosselló no ve ningún mensaje cruzado, ninguna
contradicción.
"(Vieques) tiene que ver con los derechos humanos de la
población civil", dijo. "El mensaje que surge
aquí es que Puerto Rico está unido en que la Marina
debe abandonar Vieques, pero apoya a las fuerzas armadas estadounidenses
y la participación de Puerto Rico en la defensa nacional".
Unas 100 personas de aquellas a las que él se estaba
refiriendo, en su mayoría socialistas y activistas partidarios
de la independencia, entonaban consignas contra la militarización
de Puerto Rico fuera de las instalaciones del Ejército
del Sur mientras se realizaba la ceremonia. El reciente consenso
contra la presencia de la Marina en Vieques ha llevado a los activistas
pensar que están a punto de ganar su batalla.
"Es una contradicción para los Estados Unidos pretender
ver objetivamente el asunto de Vieques mientras están reafirmando
la militarización de Puerto Rico hoy en San Juan",
dijo el senador Rubén Berrios , que ha estado acampado
en los terrenos restringidos de la Marina en Vieques durante 100
días.
"Pero el mundo está lleno de contradicciones",
manifestó. Lo importante ahora es ganar la batalla de Vieques,
para que podamos luego ganar la batalla de la desmilitarización".
Puerto Rico mantiene fuertes lazos con los militares desde
que a su población le fue reconocida la ciudadanía
estadounidense, en 1917, justa a tiempo para pelear en la Primera
Guerra Mundial.
Rossello sostuvo que la mayoría de los puertorriqueños
le da la bienvenida a la presencia militar en la isla porque "el
95 % de nuestro pueblo aprecia nuestra ciudadanía estadounidense".
Algunos discuten sobre las cantidades, pero es claro que una
abrumadora mayoría de la población local valora
esa ciudadanía. Y las consideraciones sobre la ciudadanía
influencian la discusión sobre el status político.
Muchas personas que quieren la estadidad para Puerto Rico,
y también muchos de los partidarios del actual status
de Estado Libre Asociado, no quieren que Washington reciba un
mensaje equivocado. Incluso Jackson, al prometer llevar el tema
de Vieques a la campaña nacional, fue cuidadoso en sus
expresiones.
"Esperamos que el gobierno estadounidense vea a estas
personas diciéndole a la Marina: 'Fuera como ocupante,
pero no como defensora de la paz", dijo Jackson, parado frente
a una laguna seca como consecuencia de los ejercicios de bombardeo
de la Marina.
"Y espero que el Secretario de Defensa (William) Cohen
aprecie la diferencia", concluyó.
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