Click here to see this document in English.

VIEQUES - Tras seis décadas  de bombardeos de la Marina estadounidense en Vieques, centenares de los 4900 residentes de la isla puertorriqueña están iniciando acciones legales contra la Armada, generando un volumen tal de actividad que tentó a un abogado del continente a abrir un bufete allí.

"Todos en la isla tienen un reclamo contra la Marina, al menos por el control del estado de salud", sostuvo el jueves John Arthur Eaves Jr., un abogado que desarrolla su actividad profesional en Jackson, Miss.

Eaves abrió su oficina en Vieques hace cuatro meses. En mayo, presentó una demanda por daños contra la Marina en representación de 200 isleños que manifiestan tener problemas de salud. Eaves afirma que el número podría ascender a 2000 en cuanto los médicos de San Juan, la capital de la isla principal, puedan procesar los 200 estudios médicos que, según manifiesta, recibe cada semana.

En una declaración emitida recientemente, la Marina expresó que había consultado Centros de Control de Enfermedades de la Agencia de Substancias Tóxicas y Registro de Enfermedades de Atlanta respecto a las denuncias y destacó que "ningún estudio científico -basado en datos empíricos- vincula las actividades de la Marina en Vieques con los problemas de salud de los civiles".

La Agencia de Substancias Tóxicas y Registro de Enfermedades está preparando una evaluación de la salud pública en Vieques, en la cual la Marina manifiesta estar colaborando plenamente. "La Marina se preocupa por la salud y el bienestar de sus vecinos, en Vieques y en cualquier lugar de los Estados Unidos", afirmó el comunicado.

Los residentes de Vieques denuncian problemas de salud que van desde problemas respiratorios a irritaciones en la piel, complicaciones gastrointestinales y casos de cáncer relacionados con los ejercicios militares en la isla. Entre los querellantes se encuentran ex trabajadores civiles de la Marina cuyos exámenes médicos -según Eaves- demuestran que han estado expuestos a metales fuertemente tóxicos como el uranio.

La Marina admitió haber disparado accidentalmente 263 proyectiles con cabezas de uranio en Vieques el año pasado, violando leyes federales. Hasta el momento recuperó 53 cabezas de proyectil.

Eaves expresó que una vez que completados los reclamos por cuestiones de salud se concentrará en los querellantes que tienen reclamos vinculados con daños a la propiedad y pérdidas de ganancias en actividades tan diversas como la pesca y la actividad inmobiliaria.

"Nuestra misión en Vieques es dejar claro que no existen ciudadanos americanos de segunda categoría, que no hay seres humanos de segunda clase", afirmó.

Kennedy recoge pruebas de los supuestos daños causados por la Armada de los EE.UU. en la isla de Vieques

19 de junio de 2000
Copyright © 2000 EFE News Services (EE.UU.) Inc.
Fuente: Reportero Mundial (TM)

San Juan, 19 de junio (EFE) - Roberto Rabin, un miembro del Comité para el Rescate y el Desarrollo de la Isla de Vieques, informó a EFE que el grupo acompaña al abogado ambientalista Robert F. Kennedy en la recolección de información sobre los daños causados a la isla por la Marina estadounidense, que será usada como evidencia en su juicio contra el gobierno.

Kennedy viajó a Puerto Rico para reunirse con miembros del comité que durante los últimos tres días han estado recogiendo muestras del suelo del polígono de tiro.

Kennedy es consejero senior de la organización Natural Resources Defense Council, con sede en New York y afiliada a la Pace University, que investiga las posibles violaciones de las leyes que protegen el medio ambiente en las que habría incurrido la Armada durante sus ejercicios en Vieques.

La asociación legal puertorriqueña en New York también trabaja en representación de los ciudadanos de la isla que se oponen a la continuación de los ejercicios militares.

"Durante el fin de semana se compiló información sobre serios daños ambientales y sanitarios causados por la Marina en Vieques", manifestó Rabin.

"Todos estabamos contentos y satisfechos, a pesar de que comprendemos que el trabajo legal es apenas una parte de la lucha para conseguir que la Marina se retire de Vieques. Kennedy está entusiasmado porque ya puede pronosticar el triunfo en este caso", continuó diciendo.

La Junta de Planificación de Puerto Rico emitió más tarde una declaración en la que anunciaba que la Marina planeaba comenzar esta semana una serie de ejercicios de dos a seis días de duración, en los que cinco navíos dispararán hacia el polígono de tiro proyectiles de fogueo de cinco pulgadas y aviones dejarán caer unas 830 bombas inertes en el área objetivo, al este de la isla de Vieques.

Estudios revelan una alta concentración de metales en Vieques

20 de junio de 2000
Copyright © 2000 PuertoricoWOW News Service

Por Proviana Colón Días, del PuertoricoWOW News Service

Un estudio científico efectuado en residuos, agua y muestras de sedimentos del sector oriental de Vieques reveló altas concentraciones de metales y otras substancias vinculadas con las prácticas militares en el polígono de tiro, informó el lunes la ambientalista Neftali García.

García, autora de la investigación de dos años de duración, señaló que las pruebas de laboratorio realizadas en cabellos y excrementos de un grupo de residentes de Vieques también reveló una alta concentración de metales, algunos de los cuales son carcinógenos.

Altas concentraciones de arsénico, bario, zinc, cobalto, mercurio y plomo fueron encontradas en las muestras. García indicó que las altas concentraciones de aluminio, hierro, magnesio y níquel halladas en algunas muestras son resultado directo de las prácticas militares.

La mayoría de las muestras fueron extraídas en la costa este de la isla municipio, ya que tierras occidentales estaban fuera del alcance de los investigadores. Las más altas concentraciones de metales fueron encontradas en las muestras tomadas cerca de la laguna y la bahía Icacos, y en el área comprendida entre la laguna Anones y la playa Carrucho.

"Estas altas concentraciones no son de origen natural sino que están directamente asociadas con las explosiones y las actividades militares de la Armada", afirmó García.

García no negó que las concentraciones de metal fueron también encontradas entre la población civil de la isla, pero añadió que se presentaban en "una concentración mucho menor".

El estudio médico realizado por estudiantes de la Escuela de Graduados en Planificación de Universidad de Puerto Rico sobre residentes de dos comunidades de Vieques revelaron que las enfermedades más comunes que los afectaban son: hipertensión, diabetes, asma, artritis, problemas cardíacos y cáncer.

"La intoxicación de metales de arsénico y bario ha sido vinculada con la hipertensión", explicó García, añadiendo que el cáncer podría estar asociado con las substancias encontradas en los tests.

Además, el estudio reveló que la tasa de asma en Vieques sube durante la realización de los ejercicios militares.

Una prueba de laboratorio efectuada en muestras de cabello de Shakira Soto, una residente de Vieques de cinco años de edad, reveló una alta concentración de aluminio, arsénico, plomo y níquel. García aclaró que no se realizan en la isla otras actividades, tales como la agricultura, en las que se empleen metales como los encontrados.

"La única actividad que se ha venido realizando en Vieques en los últimos 60 años, y cada vez con mayor intensidad, son las prácticas militares, puntualizó.

García reveló los descubrimientos del estudio durante una conferencia de prensa matutina realizada en el Ateneo Puertorriqueño, en la cual la acompañaban María Elena Navarro, de Women Alliance pro Vieques, y el doctor Antonio rivera Castaño, epidemiólogo del Comité para el Rescate de Vieques.

El estudio, que tuvo un costo estimado en $30.000, será puesto a disposición de todos aquellos que deseen iniciar acciones legales contra la Marina, entre los que se encuentra el grupo representado por el abogado ecologista Robert Kennedy.

Kennedy abandonó la isla el domingo, después de reunirse con un grupo de trabajo formado por expertos que recogieron evidencia para las acciones legales planeadas contra la fuerza militar.