SAN JUAN (AP) - La presidenta del Partido Popular Democrático (PPD) le pidió el jueves a los candidatos presidenciales que vigilen las intenciones del presidente Clinton de comenzar un proceso para resolver la cuestión del status de Puerto Rico antes de finalizar su mandato.

Calderón envió el jueves una carta al demócrata Al Gore y al republicano George W. Bush puntualizando que dicho proceso debe originarse en la isla, con el consentimiento de los dirigentes de los tres partidos políticos de Puerto Rico.

Calderón, que también es alcalde de San Juan y candidata a la gobernación, sostuvo que la cuestión del status debe ser considerada por el próximo presidente y no antes de las elecciones de noviembre.

La carta de Calderón surge después de una misiva del Clinton al gobernador Pedro Rosselló en la cual el presidente expresa su esperanza de que la cuestión del status de la isla esté resuelta para el próximo año. El texto de Clinton fue difundido el martes último, durante la conmemoración del 48° aniversario de la Constitución del Estado Libre Asociado de Puerto Rico.

Recientemente, Clinton se reunió con dirigentes de los tres partidos políticos locales para comenzar un proceso que resuelva la cuestión del status político de Puerto Rico. La intención es que el proceso continúe una vez que Clinton concluya su mandato presidencial.

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La cuestión del status divide a Puerto Rico

Por Iván Román

31 de julio de 2000
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SAN JUAN, Puerto Rico - El 25 de julio es una fecha que provoca mucha emoción en Puerto Rico.

Los nacionalistas marchan en el pueblo de Guanica, en el sudoeste de la isla, dando gritos de enojo y lamentándose del día en el que, en 1898, la milicia estadounidense desembarcó en la bahía y se apoderó de la isla.

Los activistas independentistas gritan indignados mientras depositan ofrendas florales en la torre de comunicaciones de Cerro Maravilla, en las sierras de Villalba, donde en 1978 la policía emboscó y disparó a dos jóvenes militantes arrodillados y con esposas.

Y los partidarios del actual Estado Libre Asociado (ELA) bailan y dan vítores para celebrar el comienzo de todo, ese día de 1952 en el que fue ratificada la Constitución de Puerto Rico, trayendo consigo un montón de esperanza.

Los sentimientos subyacentes en el mitin a favor del ELA de este año no difirieron mucho. Pero el actual sitio al status político de la isla añadió urgencia a los vítores. Armados con la decisión de un juez federal que denigra al ELA y afirma que los puertorriqueños de la isla pueden votar en las elecciones presidenciales de noviembre, los políticos que apoyan la estadidad se movilizan para hacerlo realidad.

El gobernador Pedro Rosselló piensa convocar una sesión legislativa especial en agosto para que se considere un proyecto de ley que autoriza a los puertorriqueños a votar por George W. Bush o Al Gore y que incluso dispone la creación de un Colegio Electoral con unos 10 votos, los que la isla tendría si fuera estado.

"Espero que este proyecto de ley pueda ser analizado, discutido y aprobado para que el pueblo de Puerto Rico pueda votar en las elecciones presidenciales del 7 de noviembre", dijo Rosselló en la ceremonia oficial, que fue usada para criticar al ELA en vez de conmemorarlo.

"Es una farsa, una mentira al pueblo de Puerto Rico dirigida a distraer la atención una vez más de los temas que realmente deben preocuparnos como la corrupción que todos vemos en su gobierno", expresó la alcaldesa de San Juan Sila Calderón, candidata a gobernadora por el Partido Popular Democrático (PPD), defensor del ELA.

Dado que la Constitución de los EE.UU. establece que los estados y no los individuos eligen al presidente a través del Colegio Electoral, los constitucionalistas sostienen que la decisión será revocada por las cortes o que el Senado estadounidense no contará los votos de la isla.

Inclusive algunos dirigentes del Partido Nuevo Progresista (PNP) reconocen el problema. El senador Sergio Pena Clos advirtió a sus colegas que no engañen a la gente. El comisionado residente Carlos Romero Barceló señaló que como abogado pensaba que la decisión del juez sería revocada. "Pero como político me gusta la decisión y deseo que pueda ser implementada".

Mientras efectuaba estas declaraciones en un mitin del PNP realizado el 27 de julio -dos días después de la reunión a favor del ELA- jueces federales en Hato Rey provocaron más vítores y lágrimas. Otro puñado de activistas independentistas, que había pasado un mes en prisión por invadir tierras restringidas de la Marina de Guerra estadounidense en Vieques, fueron sentenciados y liberados.

Casi 70 ya están en libertad, pero alrededor de 50 permanecen todavía en la prisión federal de Guaynabo. Para los amigos y familiares que hacían ondear sus banderas y globos, teniendo presente los vítores de los partidarios de la estadidad en toda la ciudad, fue también una semana de emociones.